Todos, incluyendo hasta el más ágil vendedor en algún momento no tuvo ni idea de cómo hacerlo, o al menos tenía incertidumbre sobre sus resultados, la habilidad de vender aparte de tener sus técnicas también depende mucho del factor emocional.

Si le preguntas a cualquier vendedor independiente habrá días cuando venden mucho y su autoestima estará por los cielos y estará por el suelo cuando no tenga muchas ventas, pero el verdadero vendedor es el que se mantiene fuerte incluso cuando los números no están tan bien.

Si lo piensas un poco, todo lo que en este momento te rodea desde tu ropa hasta el dispositivo con el que estés leyendo esto en algún momento fue una simple idea que su creador también dudo si se vendería o no.

Ahora bien, si tienes un idea o un producto, antes de venderla debes conocerla muy bien, y luego que tengas el conocimiento y la información necesaria debes filtrarla hasta poder comunicarla efectivamente.

Una técnica utilizada por los que se dedican a este arte es el Elevator pitch, consiste en presentar tu producto o servicio en menos de un minuto, como su nombre lo indica es un discurso de elevador, es decir el tiempo que pasas en un elevador con alguien debe ser suficiente para venderle una idea.

Esta técnica que inicialmente era para conseguir un posible inversionista ha ido evolucionando y siendo aplicada para todo tipo de presentaciones que intentan lograr la solución a una necesidad.

Un Elevator Pitch consiste en presentar tu proyecto en 60 segundos, en un ascensor, con tu posible inversionista.

¿En qué consiste? Primero planteas el problema, luego das el nombre de tu marca y la manera en que ella soluciona el problema junto con lo que te hace diferente a los demás del mercado. Ese método también nos ayudará a tener más clara las ideas, ya que si no eres capaz de trasmitirlo en menos de un minuto es posible que tu producto sea difícil de entender.

Hay que apoyarse de la conexión emocional, que las personas que nos estén escuchando se sientan identificados con el problema, para posteriormente poder venderles la solución

Siempre hay que apostar a la creatividad y a nuestra capacidad de vender las de forma diferente a los demás, solo de esta manera lograremos hacer saber a las personas que necesitan el producto.

Ahora que ya conoces  y sabes comunicar tu producto vamos a los pasos para lograr venderlo.

1. ¿Cuánto cuesta?

Antes de poner números, visualiza a la competencia, estudia tu mercado y verifica el valor qué ofrece el producto a la sociedad.  Desglosa el precio, todos los costos de producción, gastos y  descuentos, de esta manera podrás jugar mejor con tu oferta.

¿Qué hábitos de consumo tienen tus consumidores? ¿Qué estrategia utiliza la competencia para venderlo? ¿Cómo se vende este tipo de producto en otros países?, todo estas preguntas te hará fijar un precio realista y competitivo.

No siempre lo más barato se vende más.

2. Vende una experiencia.

Antes de vender el producto, demuéstrales a tus clientes que son importantes para tu marca, crea una experiencia de compra que lo ayude a mejorar su estilo de vida y no solo a adquirir un producto más.

¿Cómo lograr vender una experiencia? Apórtales a tus consumidores confianzas, resuelve sus dudas y ayúdalos y en el caso de una marca o tienda online, crea contenido que le aporte valor, y que sea su propia decisión comprarte el producto, pero luego que tenga conexión con lo que le ofreces.

3. Sé sincero.

Nunca omitas información solo por cerrar una venta, hacer esto tal vez te traiga liquidez al instante, pero es muy probable que no vuelvan a comprar o que ese consumidor haga saber a las demás personas la deficiencia del producto.

En el caso de la publicidad este punto es más volátil aun, una publicidad engañosa puede sepultar tu marca en un abrir y cerrar de ojos.

Las verdaderas ventas son más que intercambio de productos una relación a largo plazo.

4. Ten visibilidad.

Actualmente la mejor opción en estos momentos son las redes sociales, ya que puedes probar una idea a bajo coste, solo es cuestión de organizarse y crear un buen plan de contenido que logre fidelizar a tus clientes.

Analiza en que red social se mantiene presente tu público objetivo, y bombardelos con información de valor que logre atraerlos hasta tu producto.

Sin embargo existen muchos otros canales, es cuestión de saber dónde están los clientes potenciales de tu producto.

5. Conecta emocionalmente en tu publicidad.

La idea de la publicidad es que la gente se sienta identificada con lo que estás viendo, por eso conecta siempre con los deseos de las personas, y con la manera en la que tu producto mejorará su vida.

Existe publicidad que venden miedo, y se concentran en los problemas y necesidades, esto en muchos casos también logra vender, pero desde mi punto de vista la idea es vender algo que te aporte felicidad.

6. Ofrece servicio post venta.

No hay nada que conecte más a las personas que una marca preocupada por su bienestar, por eso preocúpate no solo en vender, también ofrece atención al cliente, soporte técnico, y resuelve cualquier duda e inconveniente que tenga el cliente luego de adquirir el cliente.

Este tal vez te haga invertir un poco más de tiempo, y tal vez dinero, pero hará que la reputación de tu marca siempre esté elevada, y marcará la diferente dentro del mercado.

Estos consejos pueden ayudarte a comenzar con buen pie tu experiencia como vendedor, sin embargo esto no debe quedarse hasta aquí, constantemente debes formarte para aprender a vender, recuerda que el mundo está cambiando y los hábitos de compra también.